Te hiciste una prueba de embarazo que dio positivo y oficialmente has entrado en “modo mamá”. Pero todavía debes ir al trabajo y hacer tus obligaciones cotidianas y te preguntas si es seguro conducir durante el embarazo.
Las tareas no esperarán nueve meses. Muchas actividades requerirán que conduzcas y te traslades como de costumbre. Sin embargo, conducir siempre es arriesgado y especialmente si estás esperando un bebé.
En este artículo te daremos algunos consejos para que puedas conducir durante el embarazo de manera segura y confiable. Pero además te diremos los riesgos que puedes tener en caso de no seguir las instrucciones adecuadas.
Consejos para conducir durante el embarazo
Estos son algunos consejos para mantenerte más segura en el automóvil al conducir durante el embarazo. Así protegerás a ese pequeño que está creciendo dentro tu barriga:
- Ajusta el asiento. Antes de conducir, asegúrate de hacer todos los ajustes necesarios en el asiento. De seguro tendrás necesidades de asiento diferentes a los demás.
- Abróchate bien el cinturón. El uso del cinturón de seguridad puede resultar incómodo para algunas embarazadas. Pero es fundamental seguir usándolo correctamente por la seguridad tuya y de tu bebé.
- Atenta a tu reacción. Conducir durante el embarazo es un proceso que distrae, ya que la atención se desvía hacia tu barriga. Tu tiempo de reacción puede ser más largo de lo normal. Asegúrate de ser cautelosa.
- Revisa tus medicamentos. Si estás tomando medicamentos verifica que no causen efectos como somnolencia, deterioro de funciones o retrasos en tiempos de reacción. De ser así, no es seguro conducir.
- Reduce las distracciones. Ya tienes suficiente con lo que llevas en tu barriga. Así que, silencia el celular y no te preocupes por cambiar la radio. Concéntrate en el camino que hay por delante.
- Deja que otros conozcan tus planes. Es aconsejable que los demás sepan adónde te diriges y cuándo piensas llegar. Esto es importante por si llegara a suceder algo imprevisto, como un neumático reventado.
- Limita el tiempo de manejo. A medida que crece tu barriga, también crece la incomodidad que sientes al manejar. Reduce tu tiempo de manejo a solo unas pocas horas.
- Lleva siempre algún refrigerio. Mantenerte hidratada y alimentada es fundamental para tu comodidad y seguridad. Carga siempre alimentos energéticos naturales como frutas o nueces y bebe mucha agua.
- Haz descansos al conducir. Incluso si conduces distancias cortas, detente cada hora más o menos para estirar las piernas. Corres más riesgo de desarrollar alguna afección relacionada a la inmovilidad.
- Detente con seguridad. Si necesitas pararte por algún motivo imprevisto, hazlo de manera segura. Verifica los carriles antes de incorporarte a la vía y asegúrate de hacerlo en una calle residencial.
Nunca te detengas al costado de una carretera o autopista, en un área que parezca insegura o no esté debidamente iluminada si viajas de noche.
Riesgos que pueden correrse al no seguir las precauciones
A nivel general no hay ningún peligro de conducir durante el embarazo. Pero extrañamente existe un riesgo mayor asociado con conducir mientras estás embarazada que cuando no lo estas.
Las mujeres embarazadas son más propensas a tener accidentes automovilísticos graves. Esto lo demuestra un estudio realizado por el Canadian Medical Association Journal.
El mismo estudio señala que el riesgo es mayor durante el segundo trimestre de embarazo. Cuando la posibilidad de que una mujer sufra un accidente es casi la misma que la de alguien con apnea del sueño.
El riesgo de un accidente disminuye en el tercer trimestre del embarazo, encuentra el estudio. Después del nacimiento del bebé, la tasa de accidentes automovilísticos graves es aún más baja que antes del embarazo.
Los efectos asociados al embarazo suponen uno de esos obstáculos.
Problemas como la fatiga, náuseas y falta de sueño, debido al comportamiento de las hormonas.
Por ello, debes estar alerta y seguir las indicaciones y consejos que te permitirán estar segura al manejar. De no hacerlo puede haber graves consecuencias y en algunos casos pudieran ser fatales.
Adaptaciones necesarias en el vehículo
Estas son algunas de las configuraciones que debes hacerle a tu vehículo cuando estás embarazada:
- Asegúrate de revisar estos elementos en tu vehículo.
- Presión de los neumáticos.
- Lubricación de la dirección asistida.
- Frenos.
- Filtro de aire.
- Luces.
- Anticongelante.
- Alineación de las ruedas.
- Reclina el asiento. Pon siempre el asiento de acuerdo a tu comodidad. Gradúalo a medida que tu barriga vaya creciendo.
- Lleva siempre una almohada de viaje. Considera una almohada lumbar, que puede acunar tu espalda y quitarle presión a tu columna.
- Verifica el cinturón de regazo y hombro. No importa si eres conductora o pasajera. Chequea que el cinturón de regazo y hombros estén en buenas condiciones.
- Cuenta con protector de barriga. A medida que tu barriga crece, usar el cinturón de seguridad puede ser incómodo. Opta por un protector de barriga que puede ofrecerte mayor comodidad y seguridad.
- Revisa las bolsas de aire. Continúa usando su cinturón de seguridad incluso si tu automóvil tiene bolsas de aire para una protección óptima. Sus beneficios superan los riesgos para una mujer embarazada.
Hasta cuándo puedes conducir si estás embarazada
La respuesta general es que nunca deberías de dejar de conducir durante el embarazo. Puedes hacerlo siempre que te sientas cómoda, puedas alcanzar todo lo que necesitas y maniobrar el automóvil de manera cómoda y segura.
Es posible que te tome tiempo conseguir tu posición correcta para manejar cómodamente. Hazlo siempre mientras estás estacionada y nunca durante la conducción.
A muchas mujeres las puedes agotar. A otras les puede resultar incómodo sentarse en el automóvil bien sea por el cinturón o por estar mucho tiempo en esa posición.
Pero todo depende de tu situación, si sientes que no tienes ningún problema, entonces continúa manejando. Tú misma te darás cuenta hasta qué etapa del embarazo puedes dejar de hacerlo.
Conclusión
Conducir durante el embarazo no debería suponer ningún tipo de problemas. Solo asegúrate de seguir ciertos consejos y tips como los que te acabamos de dar en este artículo.
Obedece las señales de tránsito, no aceleres, minimiza las distracciones y emplea siempre el cinturón de seguridad. Aunque suene banal, lo importante es que siempre estés cómoda y segura.
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